Volkswagen Navarra avisa de que sin coche eléctrico el futuro de la planta «está muy en entredicho»
En plena guerra por la adjudicación del coche eléctrico de Volkswagen entre Navarra y Martorell. El director de producción de Volkswagen Navarra, Miguel Ángel Grijalba, ha afirmado este viernes que, sin coche eléctrico, la continuidad de la planta de Landaben «está muy en entredicho», porque los coches de combustión a partir de un determinado momento «se van a dejar de vender» por las exigencias desde Bruselas.
Grijalba ha participado en la mesa redonda ‘Navarra, tierra de inversión’, en el I Foro de Multinacionales de Navarra, celebrado en Baluarte, y ha manifestado que, una vez que se decida la fabricación del coche eléctrico, el modelo de negocio «no cambia demasiado». En este sentido, ha manifestado que, con el coche eléctrico, «el proceso en sí no va a cambiar».
Según ha precisado, en cuanto a la digitalización, «sí que va a llevar a un cambio más disruptivo que el montar un coche eléctrico o un coche de combustión». «Eso nos va a venir impuesto», ha dicho, para añadir que «avanza más rápido de lo que somos capaces de digerir como personas».
Ha comentado que queda «mucho por hacer y por trabajar» en lo que tiene que ver en cómo lograr que esa renovación de personas venga ya con esa capacidad o mente digitalizada que les haga entender esos procesos que se van a tener que implementar.
Moncloa favorece a Martorell
Tal y como avanzó este diario, Moncloa está presionando a Volkswagen para que la compañía adjudique la producción del eléctrico a Martorell en detrimento de Navarra para el ensamblaje de 500.000 coches. Una decisión vital para asegurar el futuro de la factoría y el empleo en la región.
«El grupo Volkswagen ha tomado ya una decisión y las exigencias de Moncloa -dinero público- han ganado a la competitividad de la factoría de Landaben para que la producción del modelo pequeño electrificado se ensamble en Martorell», explicaron fuentes cercanas a la situación en conversaciones con este diario.